Danza con ojivas nucleares: ¿Puede desatar Corea del Norte un estallido mundial?
Condenado por el Consejo de Seguridad de la ONU, presionado y aislado por las potencias mundiales, el régimen de Pyongyang, en total soledad, sigue desafiando al «mundo occidental» con su impredecible arsenal nuclear (por ahora fuera de control), cuya capacidad de destrucción real es tan difusa como la estrategia internacional que lo mantiene como un «gran mendigo asiático» sentado sobre un polvorín atómico.¿Juegan con fuego nuclear las potencias? ¿tiene algo que perder un mendigo sobreviviente de la Guerra Fría sentado sobre un polvorín nuclear?
Por Manuel Freytas (*)
manuelfreytas@iarnoticias.com
Dentro de un análisis geopolítico militar estructural ¿Cómo cierran las ojivas de Kim Jong-un apuntando al sistema capitalista dominante y sin que nadie exclame ¡Oh, está por volar el planeta!
Para algunos expertos, Maquiavelo y la alienación llegaron muy lejos, y lo de Corea del Norte (de tanto quedar en la nada) ya se ha convertido en un show mediático de ciencia ficción con poco gancho de rating.
En octubre de 2006 Corea del Norte hizo explotar su primera bomba nuclear, a pesar de las notables amenazas que en ese sentido había recibido, por parte de EEUU y de las potencias aliadas.
Hay que aclarar que el programa nuclear de Irán o las ojivas en manos de Corea del Norte, no preocupan a EEUU por su capacidad masiva de destrucción sino por el nivel de «crisis nuclear» que puede desatar a escala planetaria.
Irán y Corea del Norte, a diferencia de la antigua disputa de las potencias en la «guerra fría» (EEUU, URSS, China) por la posibilidad de descargar un primer golpe (first strike) contra el enemigo, recrean el peligro de un estallido nuclear «fuera de control» que podría alcanzar a cualquier ciudad europea, estadounidense o israelí.
¿Qué son 7 ojivas comparadas con las decenas de miles que acumula el «club nuclear» que controla el Consejo de Seguridad de la ONU?.
El uso recurrente de la «amenazas» sin concreción ya convirtió al descendiente de Kim Jong-il en un personaje de utilería. Ya ni siquiera parecen conmover sus inaccesibles ojivas nucleares. ¿Tendrá gasolina para sus cohetes», bromeaba no hace mucho un diario europeo.
Ni Rusia ni China (las potencias emergentes del «club nuclear»), ni EEUU o las potencias de la UE parecen tan «preocupadas» por lo que haga Corea del Norte con su arsenal nuclear y sus casi dos millones de efectivos movilizados para una emergencia militar.
Hay hipótesis tranquilizadoras: Según los expertos de la OIEA, en Viena, si bien Norcorea produjo en los últimos años plutonio como para construir unas 8 armas atómicas sencillas, éstas sólo podrían ser transportadas, debido a su tamaño, en aviones de combate, que difícilmente podrían eludir las armas de intercepción de los países vecinos.
Más allá de sus estrategias disuasivas de amenazar para negociar, el régimen nuclear ahora encabezado por Kim Jong-un quiere hacer explotar el planeta capitalista, sino que aspira a que EEUU y las potencias le otorguen asistencia financiera y económica y le dejen un lugarcito bajo el sol con sus ojivas nucleares.
Desde el 2006, cuando realizó su primer experimento atómico, Norcorea recibe respuestas inmediatas -tal como busca Pyongyang- por sí o por no a sus planteos.
¿Qué quiere Kim Jong-un? Algunos dicen que comida (lo que más escasea en Pyongyang y sus alrededores), otros afirman que busca un acuerdo global sólido con EEUU que le garantice ayuda económica y el levantamiento del bloqueo comercial.
«La RPD de Corea recuerda que los EEUU son los primeros productores y exportadores de armamento en el mundo, que han financiado decenas de guerrillas e invasiones ilegales y que tienen literalmente ocupada Corea del Sur desde el 1953 con sus bases militares, desplegando más de 30.000 soldados, submarinos, bombarderos y navíos con misiles nucleares», señala el régimen en un comunicado oficial, y destaca que: «Los EEUU son los primeros interesados en que la RPD de Corea no disponga de tecnología nuclear, ya que temen que este material pudiera venderse a otros países u organizaciones».
¿El régimen de Pyongyang, un liberador tardío antiimperialista y anti-USA?
Para nada: como su padre, el descendiente de Kim Jong-il sólo busca supervivir en el poder sin que los 8 millones de norcoreanos acosados por la hambruna lo cuelguen en la plaza.
O, en todo caso, el nuevo líder norcoreano busca evitar con la propaganda bélica que un colapso del régimen de Pyongyang provoque un éxodo incontrolable de refugiados norcoreanos hacia China a través de los mil doscientos kilómetros de frontera que comparten ambos países.
En el medio, y como sucede siempre, infinidades de «teorías conspirativas» cruzan el universo de la información internacional. Por ejemplo, que el régimen norcoreano le sirve a China como un instrumento de presión contra las estrategias regionales de EEUU y la UE.
O que le sirve a Pekín como cuña geopolítica militar contra la expansión de Japón como potencia regional apadrinado por la flota nuclear y las bases militares de EEUU.
Teorías que solo cerrarían si Kim Jong-un y los suyos «trabajaran gratis», ya que el régimen de Pekín no les tira a los norcoreanos una sola moneda para salir de la crisis económica.
Si bien China fue históricamente el principal proveedor de alimentos y combustibles, sus envíos han decaído, al punto de que Norcorea hoy vive principalmente de la ayuda internacional.
Otra hipótesis, de las que andan dando vueltas, señala que el gobierno norcoreano le sirve a EEUU para justificar una «militarización» de la península coreana que le permitiría profundizar el despliegue de su aparato nuclear militar en el sudeste asiático.
Lo que tampoco encaja, dado que Washington (a pesar de las negociaciones que viene desarrollando con Pyongyang) todavía no hizo nada para solucionarle los problemas de comida, energía, y levantamiento del bloqueo que aquejan al régimen norcoreano.
¿Dispone realmente de un poder nuclear respetable Corea del Norte?
Moscú, Japón y Corea del Sur aseguran que Pyongyang cuenta con algunas ojivas, por el equivalente de dos bombas de Hiroshima cada una.
¿Juega Kim Jong-un un plan conjunto con el «eje del mal» Rusia-Irán?. Si fuera así, también trabajaría gratis, dado que ni Rusia ni Teherán le arriman ayuda económica o le suministran energía más allá de sus discursos «solidarios».
¿Es un loco desatado de la Guerra Fría como su padre Kim Jong-il?
Para nada: Un tipo que utiliza un complejo militar nuclear y una economía de guerra planificada (sobreviviente del régimen comunista) no puede estar loco. Y si está loco, en todo caso, es un loco de laboratorio, con un cuadro psiquiátrico algo más complicado y elaborado que un loco común.
Puede ser, en todo caso, que Kim Jong-un sea como fue su padre un estratega incompleto o fracasado.
Que pese a contar con el más soberbio aparato de presión «terrorista» contra el Imperio, no tenga el poder de reconvertir parte de la tecnología nuclear en comida y energía para sobrevivir, y que no tenga resto económico financiero para seguir presionado sin negociar una salida con EEUU, como le está sucediendo.
¿Le vende Corea del Norte armas o tecnología nuclear al eje Irán-Siria como afirman Israel y el espionaje norteamericano?
Inventos del Mossad y de la CIA para seguir alimentando las teorías del «terrorismo nuclear«, siempre funcional a cualquier movida militar en Asia y Medio Oriente.
Si Corea del Norte alimentara con tecnología nuclear al «eje del mal» árabe-islámico, sus planteos y amenazas a EEUU contarían con adhesiones movilizantes de los más de mil millones de musulmanes que pueblan el planeta.
¿A que juega y con quién juega Corea del Norte?
Por ahora, y según lo que se puede verificar en el rompecabezas internacional, Kim Jong-un sólo juega con Kim Jong-un.
Desde EEUU, la Unión Europea, Japón, Rusia y China hasta los países africanos y latinoamericanos, «repudiaron» en bloque y condenaron como una «provocación mundial» la prueba nuclear y los lanzamientos de misiles norcoreanos.
Washington le pidió a Moscú una respuesta «rápida y unificada» a la actual crisis nuclear norcoreana en la que coinciden tanto el Pentágono, como la OTAN y los complejos militares ruso y chino.
En forma unánime (y con la adhesión de Rusia y China) el Consejo de Seguridad de la ONU está a punto de profundizar el bloqueo económico contra Corea del Norte, lo que terminaría con las pocas reservas alimentarias y energéticas que aún le quedan.
Si embargo, todavía nadie lanzó una «alerta roja» y los mercados internacionales siguieron cotizando acciones en alza como si nada.
Le están rompiendo los nervios a Kim Jong-un. ¿Juegan con fuego nuclear las potencias? ¿tiene algo que perder un mendigo sobreviviente de la Guerra Fría sentado sobre un polvorín nuclear?
Hay hipótesis tranquilizadoras: Según los expertos de la OIEA, en Viena, si bien Norcorea produjo en los últimos años plutonio como para construir unas 8 armas atómicas sencillas, éstas sólo podrían ser transportadas, debido a su tamaño, en aviones de combate, que difícilmente podrían eludir las armas de intercepción de los países vecinos.
En los últimos dias, Kim Jong-un y su régimen rebobinaron y apuntaron a una vena sensible: Si no registran con más seriedad nuestras advertencias vamos a una guerra con Corea del Sur (la perla asiática de EEUU), les avisaron a las potencias.
¿Dos millones de norcoreanos cruzando la línea roja y los misiles de Kim Jong-un amenazando a la cuarta economía asiática? Suena diferente.
Un ataque nuclear norcoreano a Corea del Sur difícilmente podría ser interceptado a tiempo por los misiles de Japón y EEUU. Sólo en Seúl, el posible blanco, viven unos 20 millones de personas.
Por el entrelazamiento comercial (a nivel de importación y exportaciones) que mantiene Corea del Sur con el eje China-Japón-EEUU, cualquier proceso desestabilizante en su economía (como sería una guerra o un ataque nuclear) se convertiría en una crisis de alto impacto en los mercados internacionales.
¿Habrá dado en la tecla el descendiente del «enano maldito», como lo bautizó Bush a su padre?
Kim Jong-un movió nuevamente las piezas en el tablero, ahora espera respuesta.
Corea del Norte es todo oídos.
Fuente: IAR Noticias
(*) Manuel Freytas es periodista, investigador, analista de estructuras del poder, especialista en inteligencia y comunicación estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados en la Web.
Los Rothschild planean redistribuir las reservas de oro hacia China
La legendaria casa de banqueros Rothschild está intentando redistribuir las reservas de oro mundiales hacia el mercado chino, opinan los especialistas analizando las recientes actividades de la familia.
Un reciente acuerdo de Rotschild como asesor financiero de la junta directiva de la empresa de exportación de oro Spanish Mountain Gold es, junto con otros datos, una muestra inequívoca del interés de la dinastía en aumentar su control estratégico sobre el oro, moviéndolo hacia los mercados emergentes y hacia bancos centrales por todo el mundo.
A principios del presente siglo Jacob Rothschild anunció que su compañía inversora, RIT Capital Partners, organizó “carreras” de precios del oro, pero iba dejando de hacerlo para reducir los precios.
Sin embargo, estas maniobras podrían ser solo parte del plan de los Rothschild para comprar grandes cantidades de oro cuando alcanzaran su precio mínimo. Actualmente, con las principales monedas mundiales muy inestables, la demanda del oro va creciendo y los Rothschild no quieren perder su influencia en el mundo financiero.
Al mismo tiempo, la propia familia demuestra así su claro interés en los mercados emergentes orientales y en primer lugar, en China. El plan chino de desarrollo para los años 2011-2015 “ofrece grandes oportunidades para inversores tanto chinos como nacionales” y “RIT Capital Partners planea aprovecharlas”, declaró Jacob Rothschild durante un viaje a China.
El Gobierno chino apuesta por siete ramas de la industria como biotecnologías, energías alternativas, materiales innovadores y nuevas IT. Actualmente las compañías de estos sectores aportan un 3% al PIB del país, pero para 2020 su contribución debe alcanzar un 15%. Por eso la dinastía banquera de origen alemán podría utilizar sus reservas de oro para invertir en China.
Fuente: Russia Today
Los ‘microbloggers’ chinos deberán proporcionar su nombre real
Los usuarios de los servicios chinos de ‘microblog’, deberán facilitar su auténtica identidad, según una nueva norma del gobierno.
Los ‘microblog‘, donde habitualmente se divulgan opiniones e información censurada en la prensa oficial, tienen más de 300 millones de usuarios.
En la elaboración de esta nueva normativa han participado también el buró de Seguridad Pública y la oficina de administración de Internet, con jurisdicción nacional, por lo que la medida es susceptible de ser trasladada a otros municipios o provincias.
Los ‘microbloggers‘ son libres de escoger el nombre que utilicen en la red, pero, a partir de ahora, deben facilitar su identidad real a los administradores de la web antes de publicar opiniones o contenidos, de forma que controlen el contenido de críticas vertidas por los usuarios, lo que en China puede conllevar graves represalias, como por ejemplo en el caso del Premio Nobel de la Paz 2010, Liu Xiaobo que cumple condena por haber redactado, y publicado un manifiesto en el que él y otros cientos de ciudadanos chinos pedían reformas democráticas, entre ellas el fin de la censura.
Por otro lado, un funcionario de la Oficina de Información de Pekín señaló a la agencia de noticias Xinhua, bajo condición de «anonimato«, que «la nueva normativa está destinada a proteger los intereses de los usuarios y a mejorar la credibilidad de la web«.
En los últimos meses ‘Weibo‘, uno de los ‘microblogs‘ más usados en China perteneciente a Sina.com, ha aireado asuntos de interés público.
Sin embargo, grupos de defensa de la libertad de expresión y de los derechos humanos, como Amnistía Internacional señalan que el país asiático es uno de los más censores del mundo, con varios «ciberdisidentes» encarcelados, y cuenta con la tecnología más sofisticada para silenciar la red.
Fuente: El Mundo
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Ejército chino programa importantes maniobras militares cerca de Pakistán para responder a EEUU
15 de Diciembre de 2011 – El ejército chino ha realizado maniobras militares muy importantes cerca de Pakistán para responder al aumento de tropas estadounidenses en la región, ya que un alto funcionario del gobierno chino advirtió que cualquier amenaza para Pakistán sería considerada como una amenaza directa a China.
Citando un informe de la Televisión Central china Junshija, un funcionario anónimo del gobierno advirtió que “cualquier amenaza para Pakistán es una amenaza para China”, en respuesta al recrudecimiento de hostilidad que Estados Unidos y la OTAN dirigieron hacia Pakistán, y a que la OTAN mató a 26 soldados pakistaníes la semana pasada.
Pakistán ha respondido al ataque aéreo cerrando su frontera con Afganistán impidiendo así que los suministros lleguen al país ocupado por Estados Unidos.
Según el informe, los Estados Unidos están concentrando tropas en la frontera pakistaní en un acto de agresión que China ve como un ataque directo a su estrecha alianza con el país. En respuesta a esta situación, China ha enviado recientemente en el noroeste de la meseta, cerca de Pakistán, una buena parte del segundo regimiento de artillería del Ejército Popular de Liberación (EPL) con sofisticados DF-21C y misiles tácticos de corto alcance DF-11 con el fin de hacer ejercicios militares importantes cuya meta es mostrar la “actitud de China hacia la amenaza de los Estados Unidos a Pakistán”.
Los ejercicios se llevaron a cabo del 14 al 27 de Noviembre e implicaron a las tropas pakistaníes. Estas informaciones provienen de varias fuentes de noticias chinas.
El informe hace especial hincapié en la posición de China afirmando que su alianza con Pakistán representa una “fraternidad” y que “China nunca estará en paz si Pakistán se pierde”.
“A nivel militar, China llevará a cabo importantes ejercicios de combate en el desierto de Pakistán el 16”, declara el informe traducido. “América siempre ha deseado Pakistán, especialmente en los últimos años. Mientras la guerra americana se prolonga en Afganistán y que acciones militares contra la determinación de Irán se hacen cada vez más probables, la amenaza de confrontación con China aumenta también, y Pakistán es el lugar para Estados Unidos para obtener una ventaja militar estratégica y geográfica”.
Como se informó anteriormente, mientras que la retórica de los medios chinos en lengua inglesa habla de hostilidades hacia Pakistán e Irán de manera moderada, los debates que tienen lugar en China se hacen de manera mucho más bélica.
En respuesta a una creciente hostilidad occidental hacia Irán, el Mayor General Zhang Zhaozhong comentó que “China no dudará en proteger a Irán, incluso si desencadenase una tercera guerra mundial”. Estos comentarios provocan muchos debates en China.
El tema de Irán se discute también en el informe de los medios de comunicación chinos. No se recomienda ningún asalto militar occidental en Irán. China quiso ejercer una presión a este propósito a través de la demostración de la potencia de sus recientes maniobras militares. El embajador chino ante la ONU ha advertido al director general de la IAEA, Yukiya Amano, de no crear pruebas “sin fundamento” para justificar un ataque contra Irán en nombre de detener su controvertido programa nuclear.
Fuente: Aporrea.org
China almacenará datos de los ciudadanos que utilicen wifi en lugares públicos
China va a almacenar datos de los ciudadanos que utilicen las redes wifi en lugares públicos. La medida tiene como objetivo aumentar la seguridad y «descubrir a delincuentes en fuga», según el ejecutivo.
Se controlarán las instalaciones wifi de los establecimientos públicos que las ofrezcan, y se monitarizarán las páginas visitadas, las contraseñas y los números de cuenta.
Esta nueva medida de control, que comenzó a aplicarse desde finales de Junio en algunos distritos de Pekín, «se hará extensiva en los próximos meses a todo el territorio nacional«, según fuentes del Buró de Seguridad Pública citadas por el diario ‘Nuevo Pekín‘.
El anuncio hecho por las autoridades obliga a la instalación de un software de control que cuesta unos 20.000 yuanes (2.170 euros) y que corre a cuenta de los dueño de los locales, quienes, de negarse a su uso, podrían ser sancionados hasta con el cierre de sus establecimientos.
Fuentes de U-ren, empresa creadora del software, en declaraciones al diario, aseguraron que las direcciones, horarios de uso y demás datos «se guardarán durante 60 días y luego se borrarán del sistema, por lo que no serán una amenaza para la intimidad de los usuarios«.
Esta decisión se añade a las que ya realiza el gobierno chino, que monitoriza determinados mensajes de texto y correo electrónico en un país donde la censura en Internet es una realidad y en el que páginas como Facebook, Twitter o Youtube son inaccesibles a no ser que se cuente con una conexión VPN.
Fuente: El Mundo
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Quién es Zbigniew Brzezinski y cual es su rol en el Plan de Nuevo Orden Mundial (NWO)

Zbigniew Brzezinski.
15 de Agosto de 2010
Brzezinski, ex consejero del presidente estadounidense Jimmy Carter, encarna la continuidad de la política extranjera de los EEUU, lo que no significa que sea una política de tendencia demócrata o republicana. Gran admirador de Henry Kissinger, Brzezinski siempre ha defendido, alabado y demostrado sumo respeto por los dos conceptos de diplomacia del «maestro», el equilibrio de las potencias llevado a teoría por Metternich y la doctrina «containment» elaborada por George Kennan.
Zbigniew Brzezinski preconiza hoy cómo se debe debilitar y acorralar militarmente a Rusia, y está convencido de que la mejor manera es la desestabilización de sus regiones fronterizas, una estrategia política que mucho interés despertó en el equipo del fallido candidato presidencial estadounidense John Kerry, equipo que reclutó a su hijo Mark Brzezinski como consejero para política exterior.
Según el discurso de George W. Bush durante la campaña presidencial del año 2000, hubiéramos podido esperar que asumiera -según la doctrina de su consejero, «el halcón» Wolfowitz-, una actitud rígida, incluso agresiva hacia la Rusia de Vladimir Putin. En vez de eso, hemos observado un trato inédito en las relaciones políticas mutuas de estas dos grandes naciones. Esto ha sucedido después del 11 de Septiembre de 2001.
Muchos observadores y analistas estiman que existía un acuerdo entre Putin y Bush, por el cual la administración norteamericana se privaría de criticar las operaciones militares rusas en Chechenia a condición de que Putin no se entrometiera en las intervenciones e injerencias estadounidenses en el Medio Oriente.
Esta explicación no da la debida importancia a los hechos del 11 de septiembre de 2001 y al contrario los trata como si fueran una abstracción. Otro tanto sucede con los elementos provenientes del Kremlin con respecto a los mismos sucesos. Podemos añadir que las administraciones republicanas han dado siempre una mayor importancia al Medio Oriente, mientras que la tradición política demócrata en política exterior se centraliza más en Eurasia.
Para elaborar su estrategia frente a la entonces URSS, y más tarde para los Estados del Este, recientemente emancipados de la influencia soviética, el campo demócrata se ha apoyado -desde que Jimmy Carter asumió el poder-, en un hombre brillante, pero sin escrúpulos, y también un acérrimo antirruso: Zbigniew Brzezinski.
La doctrina de este conocido profesor ha logrado adeptos fuera del Partido Demócrata, por el simple hecho de haber definido el imperativo absoluto de la supervivencia y la prosperidad del Imperio: la conquista de Eurasia.
Este catedrático nació en Varsovia en 1928, hijo de un diplomático polaco. Brzezinski emigra a Canadá a la edad de diez años cuando su padre fue destacado en ese país. Obtiene una licenciatura y una maestría en la Universidad Mc Gill de Montreal, y, posteriormente, un doctorado en Harvard en 1953, convirtiéndose en ciudadano estadounidense poco después. Contrae matrimonio con la hija del ex presidente checoslovaco Eduardo Benes.
Entre 1966 y 1968 se desempeña como miembro del Consejo de Planificación Política del Departamento de Estado de los EEUU, donde desarrolla la estrategia de «implicación pacífica» frente y hacia la Unión Soviética, todo esto dentro del marco de la Guerra Fría. En Octubre de 1966 convence al presidente estadounidense Johnson de modificar las prioridades estratégicas de modo que el «deshielo» sea colocado antes de la reunificación alemana.
Durante la campaña presidencial de 1968, Brzezinski preside el grupo de trabajo encargado de la política exterior del candidato demócrata Hubert H. Humphrey, que perdería finalmente ante Richard Nixon.
El inspirador de la creación de la Comisión Trilateral
A principios de los años setenta, Brzezinski se distingue como analista cuando anuncia proféticamente la llegada de actores mayores al escenario del poder mundial. Se trata de Europa y Japón, cuyas economías se han levantado rápidamente después de la Segunda Guerra Mundial.
En un artículo suyo publicado en la revista Foreign Affaire, en 1970, expone su visión de este «Nuevo Orden Mundial»: «Se hace necesaria una visión nueva y más audaz -la creación de una comunidad de países desarrollados que puedan tratar de manera eficaz los amplios problemas de la humanidad. Además de los Estados Unidos de América y Europa Occidental, debe incluirse a Japón (…)
«Un consejo formado por miembros de Estados Unidos, Europa Oriental y Japón que fomentara encuentros regulares entre los jefes de gobierno, pero también entre personalidades menos importantes, sería un buen comienzo». El mismo año, Brzezinski lanza nuevas ideas en su nuevo libro titulado: Between two Ages [1], donde explica que ha llegado la era de reequilibrar el poder mundial, poder que debe pasar a manos de un nuevo orden político global basado en un vínculo económico trilateral entre Japón, Europa y Estados Unidos.
La revolución de las técnicas de producción, el cambio de la industria pesada a la electrónica, debía provocar un trastorno de sistemas políticos y una nueva generación de élites en el poder. David Rockefeller, entusiasmado con estos conceptos, lo contrata entonces para crear la Comisión Trilateral y lo nombra director. Esta fue establecida oficialmente en 1973, y reúne a importantes figuras del comercio mundial, de los medios bancarios internacionales, gobernantes y los grandes medios de comunicación europeos, japoneses y norteamericanos.
Cuando ocurrió el primera crisis petrolera, la principal preocupación de estos maestros de las finanzas mundiales fue la de quitarse de encima la responsabilidad de la deuda exterior de los países en vías de desarrollo, dando mayores obligaciones y fortaleciendo el Fondo Monetario Internacional (FMI). También se trataba para los Estados Unidos, debilitados en aquella época por su fracaso militar en Vietnam, de apoyarse en cada extremo geográfico del continente euroasiático, donde tenían gran influencia después la Segunda Guerra Mundial, con la finalidad de mantener y extender su hegemonía.
Esta misión, vista desde afuera, otorga sin dudas a Brzezinski una imagen de defensor de la paz, portavoz de la disminución de la tensión mundial (Guerra Fría) y de las relaciones multilaterales, e incluso -ante los ojos de la extrema derecha-, una apariencia de globalista inspirado en el Marxismo.
Para llevar a cabo los grandes planes de la Comisión Trilateral, lo mejor era que uno de sus miembros llegara a ser presidente de los Estados Unidos.
El presidente Carter y el doble juego
Desde la creación de la Comisión Trilateral, el pastor Jimmy Carter era uno de los que con seguridad formaban parte del equipo Rockefeller-Brzezinski. Había abierto las primeras oficinas comerciales para el estado de Georgia en Bruselas y en Tokio, cosa que hacía de él la imagen modelo o el concepto fundador de la Comisión [2].
Para su nominación como candidato a las elecciones y la elección presidencial de 1976, Rockfeller puso en funcionamiento sus relaciones en Wall Street y a trabajar a Brzezinski, cuya influencia académica al servicio del candidato demócrata Jimmy Carter fue de gran provecho para que ganara las elecciones. Naturalmente, cuando Carter fue elegido, Brzezinski ocupó el puesto privilegiado de consejero de seguridad nacional [3].
Una vez en su silla, Carter definió como prioridad la reducción del arsenal militar nuclear de los dos bloques (EEUU-URSS). Sin embargo, la crisis de los misiles SS-20 soviéticos apuntados hacia Europa hizo que Carter reaccionara con el despliegue de los mísiles Pershing, lo que arruinó sus esfuerzos, sinceros o no, y puso a ambos bloques en una situación de desconfianza recíproca.
Se puede constatar que en aquella época el campo soviético tenía buenas razones para sospechar que su adversario realizaba un doble juego: la derrota militar de los EEUU en Vietnam les obliga a mantener cierta modestia en el plano militar y estratégico, mientras que Brzezinski preparaba su plan de guerra por mandato, para preparar una trampa y obligar a la Unión Soviética a entrar en un conflicto periférico.
La desestabilización del régimen comunista afgano y el financiamiento y entrega de armas a las primeras milicias jihadistas anticomunistas en 1979 provocaron, como previsto, la entrada del Ejército Rojo en Afganistán. Para ello Brzezinski se apoya en los efectivos servicios de espionaje e inteligencia paquistaníes, el temido ISI.
Cuando la revista francesa Le Nouvel Observateur le realizó una entrevista en 1998, Brzezinski reconoció que el equipamiento de las tropas antisoviéticas de Bin Laden era anterior a la invasión rusa y destinado a provocar su reacción:
Le Nouvel Observateur: El ex director de la CIA, Robert Gates, lo afirma en sus Memorias: los servicios secretos norteamericanos comenzaron a ayudar a los mujaidines afganos seis meses antes de la intervención soviética. En esa época usted era el consejero del presidente Carter y su papel fue clave en este asunto. ¿Lo confirma?
Zbigniew Brzezinski: Sí. Según la versión oficial de la historia, la ayuda de la CIA a los mujaidines se inició en el año 1980, es decir, luego que el ejército soviético invadiera a Afganistán el 24 de Diciembre de 1979. Pero la realidad, mantenida en secreto hasta hoy, es muy distinta: fue el 3 de Julio de 1979 que el presidente Carter firmó la primera directiva sobre la asistencia clandestina a los opositores del régimen pro soviético de Kabul. Aquel día le escribí una nota al presidente en la que le explicaba que en mi opinión aquella ayuda provocaría la intervención de los soviéticos. (…) No empujamos a los rusos a intervenir, pero conscientemente aumentamos las probabilidades de que lo hicieran.
N.O.: Cuando los soviéticos justificaron su intervención afirmando que luchaban contra una injerencia secreta de los Estados Unidos nadie les creyó, sin embargo había un fondo de verdad. ¿No lamenta nada hoy?
Z. Brz.: ¿Lamentar qué? Esa operación secreta era una excelente idea. Tuvo como efecto atraer a los rusos hacia la trampa afgana, ¿y usted quiere que lo lamente? El día en que los soviéticos cruzaron oficialmente la frontera afgana escribí al presidente Carter en esencia: «Esta es nuestra oportunidad de darle a la URSS su Vietnam» (…).
N.O.: ¿Tampoco lamenta usted el haber favorecido el integrismo islámico, haber entregado armas y asesoría a futuros terroristas?
Z. Brz.: ¿Qué es lo más importante ante la mirada de la historia mundial, los talibanes o la caída del imperio soviético? ¿Algunos islamistas excitados o la liberación de Europa Central y el fin de la Guerra Fría?» [4]
(Nota de la redacción de la Red Voltaire: el conflicto en Afganistán desde sus inicios en 1979 ha causado miles de miles de muertos, para algunos observadores un millón de muertos y desplazado gran parte de la población civil del país, en la lamentable condición de refugiado, pero para el Sr. Brzezinski los fines justifican los medios).
Al hablar de «algunos islamistas excitados» en esta entrevista, Brzezinski no subestima el poderío de Al Qaeda, pero caracteriza la realidad de lo que los neoconservadores han erigido en mito a fin de justificar su cruzada mundial. Claro que un miembro del Council on Foreign Relations se cuidaría muy bien hoy de ser tan categórico.
Alianza objetiva con China y apoyo incondicional al Shah de Irán
Si bien Nixon y Kissinger habían jugado decididamente con el miedo al cerco de la Unión Soviética, iniciando un proceso de normalización de las relaciones con China, una parte de los más allegados a Carter desconfiaba de este acercamiento que pretendía Brzezinski.
Al llegar a la Casa Blanca, Carter había afirmado que optaría por el diálogo con la URSS y guardaría distancia con respecto a la República Popular China, pero su secretario de Estado, Cyrus Vance se enfrentó rápidamente a la obsesión antirrusa de Brzezinski y durante todo su mandato Carter tuvo que esforzarse por conciliar los antagonismos de su administración.
Quien hacía las veces de mediador entre estos dos polos era Richard C. Holbrooke, futuro embajador de los Estados Unidos en la ONU y asesor de John Kerry para la política exterior durante su campaña, junto a Mark Brzezinski, hijo de Zbigniew. Según Cyrus Vance y otros partidarios del diálogo, como el renegado demócrata Averell Arriman, la lógica triangular de cerco sólo podía conducir, en el mejor de los casos, a un malentendido con la URSS, cuando no a la guerra.
Preconizaban el diálogo sobre el desarme y la cooperación con la Unión Soviética para neutralizar los conflictos del Tercer Mundo. La normalización de las relaciones con China siguió en marcha. Brzezinski llegó a ultimar un programa conjunto de cooperación estratégica y a mantener buenas relaciones personales con Deng Xiaoping, lo que le vale ser actualmente bien visto entre los chinos.
La misma desconfianza de Brzezinski hacia la URSS se encuentra en su actitud con respecto a Irán, que bajo el régimen del Shah era considerado un baluarte contra la influencia soviética en el Medio Oriente. Así, Brzezinski le aseguró su apoyo al Shah hasta el último momento, y pidió la intervención militar de los Estados Unidos para mantenerlo en el poder incluso cuando una parte de la administración Carter, a la cabeza de la cual se encontraba el secretario de Estado, quería su salida.
Sin embargo, las acciones concretas de Washington fueron dictadas por el punto de vista del Departamento de Estado, y, a pesar de las conversaciones con los generales que derrocaron al Shah para garantizar un régimen moderado al frente del país, fue Khomeini quien ocupó el poder en un ras de mar popular.
Participó con Carter en las negociaciones de Camp David 1 en 1977 y desempeñó un papel en la firma del tratado de paz entre Israel y Egipto sin necesidad de tener que imponer su presencia en el momento culminante de los debates, contrariamente a lo que siempre hizo cuando se trataba de la URSS.
Vuelve la amenaza rusa frente a la hegemonía norteamericana
En 1989 Brzezinski abandona la Universidad de Columbia, donde enseñaba desde 1960, para dedicarse a la elaboración del plan de estatus independiente de Ucrania, lo que marca el inicio de su compromiso con vistas a prevenir el resurgimiento de Rusia como superpotencia. Por el contrario defiende la integración de Rusia al sistema de Occidente y el «pluripartidismo geopolítico» en el espacio de la ex Unión Soviética.
Por otra parte, desarrolla «un plan para Europa» que pasaría por la extensión de la OTAN a las repúblicas bálticas. Sus esfuerzos darán frutos varios años más tarde, especialmente con la integración de las tres repúblicas bálticas a la OTAN en 2002. Durante los años 90 es igualmente el emisario especial del presidente de los Estados Unidos para la promoción del mayor proyecto de infraestructura petrolera del mundo, el oleoducto Bakú-Tbilissi-Ceyhan.
Dicho proyecto representa para él la mejor concretización de sus ambiciones tendentes a impedir el renacimiento de Rusia. Paralelamente preside desde 1999 el Comité Norteamericano para la Paz en Chechenia (American Committee for Peace in Chechnya), instalado en los locales de Freedom House, cargo desde el que pretende intervenir en las negociaciones de paz entre el gobierno ruso y los independentistas dirigidos por Mashkadov.
Sin embargo, estas actividades, cuidadosamente revestidas de buenas intenciones «a lo demócrata» tienen cada vez más dificultades para disimular la realidad subyacente: la de un apoyo encubierto a los independentistas para mantener una guerra periférica, como en Afganistán, a fin de debilitar a Rusia y mantenerla alejada de las ganancias generadas por los recursos del Mar Caspio.
La materialización de la doctrina Brzezinski en el sentido de que «Una potencia que domine Eurasia controlaría dos de las regiones más avanzadas y económicamente productivas del mundo» pasa por la extensión de la OTAN hacia el Este, en lo que trabajó activamente la administración Clinton. ¿Pero cómo venderles esta necesidad de la OTAN a los europeos? «La entidad europea, situada en el borde occidental de Eurasia, y en la proximidad más inmediata de África, está más expuesta a los riesgos inherentes al desorden global creciente que una América políticamente más unida, militarmente más poderosa y geográficamente más aislada (…).
Los europeos estarán más inmediatamente expuestos al riesgo en caso de que un imperialismo chauvinista anime nuevamente la política exterior rusa», explicaba Brzezinski en la revista National Interest en 2000 [5]. Esto tiene el mérito de la claridad: el despliegue de las fuerzas de la OTAN alrededor de Rusia era una medida preventiva. Si Rusia reacciona poniéndose a la defensiva, ello constituiría la prueba de que aspira a restaurar su imperio y a una vuelta al totalitarismo.
Trabajando al mismo tiempo como consultante para BP-Amoco y Freedom House, Brzezinski está encargado en Azerbaiyán de redorar la imagen del dirigente Heidar Alyiev. Para ello no vaciló en calificar al dictador como un «tipo simpático» en una entrevista al New York Times [6]. Como justificación al apoyo anglosajón a la dictadura de Aliyev, Brzezinski argumenta que tras siete décadas de gobierno comunista no puede esperarse que Azerbaiyán y las demás repúblicas de la antigua Unión Soviética adopten la democracia en un lapso tan corto.
Si bien la represión política bajo el régimen de Aliyev tuvo una tendencia a acentuarse durante estos últimos años a medida que disminuían las expectativas sobre las riquezas del Caspio, Azerbaiyán no dejó por ello de pasar del estatus de país «no libre» al de «parcialmente libre» en la clasificación de Freedom House [7].
Al mismo tiempo, en 1999, la secretaria de Estado y discípula de Brzezinski, Madeleine Albright, invitaba a Heidar Aliyev a la celebración del aniversario de la OTAN. Siempre en la misma perspectiva de implantación de la OTAN para permitir a los intereses occidentales, sobre todo petroleros, implantarse en la región, Georgia, Azerbaiyán y Ucrania organizaron ejercicios militares conjuntos el 16 de Abril de 1999 auspiciados por el programa «Asociación para la Paz», de la OTAN [8].
Además de sus actividades de consultante para BP-Amoco y Freedom House, Brzezinski apoya o presta su nombre a todo un sistema de fondos y de ONGs (organizaciones no gubernamentales) que apadrinan a las castas, a los intelectuales y a las élites de la antigua órbita soviética.
Por iniciativa del Comité Norteamericano para la Paz en Chechenia, del que Brzezinski es presidente, tuvo lugar una reunión entre los principales líderes del movimiento checheno entre los días 16 y 18 de Agosto de 2002, en Lichtenstein, encuentro que se realizó dos meses después del realizado entre Bassaiev y Maskhadov, donde se estableció el acuerdo sobre la dirección común de las «Fuerzas Armadas de la República Chechena de Ichkeria».
Los participantes concluyeron que Chechenia no podía seguir incluida en Rusia, que era necesaria una amplia autonomía y que se imponían negociaciones con Maskhadov. La toma de rehenes de Beslán, reivindicada por Bassaiev, ¿forma parte del proceso de reivindicación de independencia de Chechenia o del proceso de desestabilización de Rusia? [9].
Podemos hacernos algunas preguntas a partir del hecho de que la principal consecuencia de esta acción fue el ascenso de las tensiones entre Osetia del Norte y la vecina Inguchia, es decir, una «balcanización» cada vez más importante de la región
Hoy Zbigniew Brzezinski es sobre todo activo en el seno del CSIS, pero sigue siendo el cerebro del programa demócrata en política exterior, de lo que da fe la obsesión del candidato Kerry, y sobre todo de su compañero de candidatura John Edwards, en lo referente a Rusia.
Según los consejos de Mark Brzezinski, eligieron adoptar como primera prioridad la cuestión del desarme nuclear de Rusia, cuando esta ha recuperado su capacidad de producción de petróleo de antes del derrumbe de la URSS y cuando el Estado ruso se beneficia ampliamente del precio actual del crudo, lo que recientemente le ha permitido duplicar su presupuesto de defensa. La cuestión del peligro del vetusto arsenal nuclear ruso no es por lo tanto algo de actualidad, contrariamente a lo que pretende John Kerry.
Su objetivo es otro, más vinculado a la estrategia de subordinación de Rusia defendida desde hace varias décadas por Zbigniew Brzezinski, pero es más difícil de ahora en adelante convencer a la opinión mundial de que Rusia encarna el mal absoluto y de que si no es subordinada volverá al totalitarismo [10].
Para ello hay que provocar su reacción de igual forma que en Afganistán en 1979, pues contrariamente a los Estados Unidos, está a buen resguardo de problemas de suministro energético para las próximas décadas. Así, verificamos una deriva en el discurso de Brzezinski, que calificaba recientemente a Vladimir Putin de «Benito Mussolini ruso», en entrevistas concedidas al Wall Street Journal et au Novaya Gazetta.
Invasión soviética de Afganistán (1979)
A finales de Diciembre de 1979, el Ejército Rojo de la URSS invadió Afganistán con 110,000 tropas terrestres, después de aceptar la petición del PDP (Partido Democrático Popular), de que interviniera en su ayuda, pues la movilización muyahidines provenientes de Pakistán, Arabia Saudí, Irán e incluso Argelia, armados y asesorados por la CIA, amenazaba la estabilidad y viabilidad del gobierno. El Presidente Carter suspendió sus vacaciones navideñas y volvió a Washington para mantener consultas urgentes con sus colaboradores. Brzezinski recomendó a Carter que pidiese al Senado que postergara el estudio del tratado SALT II, cancelara la venta de cereales a la URSS, suspendiera los privilegios pesqueros de los barcos soviéticos, y congelara los intercambios económicos y culturales.
Apoyó la venta de armamento moderno a Pakistán, y aseguró el acuerdo con Arabia Saudita para financiar operaciones de ayuda encubierta a los muyahidines afganos. Cabe resaltar que la intervención de los muyahidines, financiados por Arabia Saudí Osama Bin Laden a título personal y la CIA y entrenados por esta última, comenzó bastante antes de la invasión soviética. Así, el 3 de Julio de 1979, bajo supervisión del Consejo de Seguridad Nacional de Brzezinski, se había firmado ya la primera directiva sobre la asistencia clandestina a los opositores del régimen izquierdista de Kabul. Sin embargo, hay que subrayar que incluso la CIA había reconocido el carácter popular y autónomo del PDP y nunca se refirió al PDP como “agente de Moscú”.
Revolución en Irán (1979-1980)
Ante la inminente revolución iraní, dentro de la Administración Carter, Zbigniew Brzezinski fue el máximo valedor de la estrategia de apoyar hasta el último momento al ya debilitado Sha de Persia. Llegando a sugerir una intervención armada de EEUU para mantenerlo en el poder. Una vez consumada su caída, la estrategia de contraataque se basaría en presionar a Saddam Hussein a atacar a Irán.
En la primavera de 1980, Brzezinski indicó que Washington estaba dispuesto a cooperar con Saddam. Le aseguró que EEUU no se opondría si se apoderaba del suroeste de Irán. También convenció a los Gobiernos amigos de Kuwait y Egipto para que aconsejaran a Iraq que atacase Irán.
Para Brzezinski, los acontecimientos confirmaban una correlación de fuerzas mundiales, y obligaban a EEUU a involucrarse en una guerra encubierta de proporciones multicontinentales contra la infiltración soviética en Oriente Medio y América Central.
Últimos años
Zbigniew Brzezinski es miembro de la junta directiva de Council on Foreign Relations, Atlantic Council, National Endowment for Democracy, Center for Strategic and International Studies, y Amnistía Internacional. Es actualmente profesor en la Paul H. Nitze School of Advanced International Studies de la Universidad Johns Hopkins.
Su hijo Mark Brzezinski es un abogado que trabajó en el Consejo de Seguridad Nacional durante la Administración Clinton, y ha integrado el equipo de asesores en política exterior de la campaña presidencial del Senador Barack Obama. Su otro hijo, Ian Brzezinski, ha asesorado a la campaña presidencial del Senador John McCain.
Fue requerido en 2006 ante una audiencia del Senado de Estados Unidos, donde explico que se podría dar un atentado terrorista como el del 11 de Septiembre, para iniciar la guerra contra Irán, afirmó esto: «Un escenario posible para un enfrentamiento militar con Irán implica que el fracaso iraquí alcance los límites americanos; seguido de acusaciones americanas que hagan a Irán responsable de ese fracaso; después, por algunas provocaciones en Irak o un acto terrorista en suelo americano, [acto] del cual se haría responsable a Irán. Esto pudiera culminar con una acción militar americana «defensiva» contra Irán que sumergiría a una América aislada en un profundo lodazal en el que estarían incluidos Irán, Irak, Afganistán y Pakistán«.
Notas
[1] Between two Ages: America’s Role in the Technetronic Era, por Zbigniew Brzezinski, editorial Harper, 1971. Édition française : Révolution technetronique, editorial Calman-Lévy, 1971.
[2] Es igualmente la Comisión Trilateral la que llevará al presidente francés Giscard d’Estaing a escoger como primer ministro a uno de sus miembros, Raymond Barre, profesor de Economía y sin experiencia política.
[3] Brzezinski llama junto a sí a Madeleine K. Albright (cuyo padre sirvió en Checoslovaquia durante el gobierno del suegro de Brzezinki, Eduard Benes), y a los dos teóricos del conflicto o Choque de civilizaciones Bernard Lewis et Samuel P.Huntington.
[4] Le Nouvel Observateur No. 1732, del 15 al 21 de Enero de 1998, p.76.
[5] Citado en «Bribing Montenegro – It didn’t work», por George Szamuely, antiwar, 15 de Junio de 2000.
[6] «Freedom spells B-A-K-U», Counterpunch Magazine, 1999.
[7] Ver: «Freedom House, quand la liberté n’est qu’un slogan», Voltaire, 7 de Septiembre de 2004 artículo en francés que será pronto publicado por la Red Voltaire.
[8] «U.S. and NATO goals in the Balkans», por Lenora Foerstel, International Action Center, 1999.
[9] «Beslán: La responsabilidad del ataque genocida apunta a los anglosajones» por Marivilia Carrasco, Agencia IPI y la redacción de Voltaire, 19 de Septiembre de 2004.
[10] «115 atlantistas contra Rusia» por Thierry Meyssan, Voltaire, 26 de Noviembre de 2004.
Fuente: 1984
Días de cristales rotos en Pekín

Sillas vacías forman el nombre de 'Wei' en Taipei, en honor al disidente chino. | Afp
Por David Jiménez
Incluso para un régimen que siempre ha despreciado el pensamiento independiente, bajo cuyo gobierno se puede desaparecer sin más, la represión de los últimos meses supone una escalada. Y lo es, en parte, porque el castigo en China ha dejado de limitarse al acusado. Su abogado, sus amigos o su familia suelen acompañarles en una persecución que incluye arrestos, pérdida del trabajo y, en ocasiones, violencia física.
Los motivos de la campaña contra la disidencia varían desde el temor del Partido Comunista a un contagio de las revueltas árabes al tradicional endurecimiento que experimenta el régimen en vísperas de la sucesión en el poder, prevista para el próximo año. La explicación más simple: la dictadura se muestra crecientemente insegura ante las dificultades para controlar lo que dicen, leen y ven sus ciudadanos, sobre todo en Internet.
La creencia general es que no hay nada que podamos hacer para forzar a los líderes chinos a respetar los derechos humanos. Nada salvo evitar convertirnos en sus cómplices con nuestro silencio, la opción mayoritariamente elegida.
Cómplices
Cómplices son los líderes políticos que como José Luis Rodríguez Zapatero viajan a China con el mensaje de que no les importa lo que ocurra con los detenidos, mientras sus carceleros compren un poco de nuestra deuda o inviertan en alguna caja arruinada.
Cómplices son los periodistas que informan desde esa dictadura como si no lo fuera, omitiendo o minimizando sistemáticamente los abusos.
Cómplices son los empresarios que no se conforman con hacer negocios en China, a lo que tienen todo el derecho, sino que han formado el principal lobby de presión a favor del mantenimiento de la dictadura.
Cómplices son los diplomáticos occidentales que no tienen rubor en confesar su admiración por un régimen que no respeta ninguno de los derechos reconocidos en el país al que supuestamente representan.
Y cómplices son todos aquellos expatriados que no se cansan de repetir que ellos no respiran represión alguna en China, ignorando la inmunidad que les confiere ser extranjeros. Ninguno de ellos teme una visita a medianoche de los agentes de la Oficina de Seguridad. En sus pequeños oasis, todo es libertad.
Juegos Olímpicos
Hablamos de los mismos que pidieron incansablemente la legitimación del régimen entregándole los Juegos Olímpicos de 2008 y recomendando callar ante los abusos, asegurando que era la mejor estrategia para abrir el país políticamente.
Ahora que Pekín se ha quedado con la legitimidad, devolviendo a cambio más represión, no les escucharemos rectificar o levantar la voz en contra de las detenciones. Les va el puesto, la cuenta de resultados, tener que asumir las contradicciones de su agradable vida oriental o, como en el caso de España, arriesgar una ayuda china para tapar las grietas de nuestros años de excesos.
Haber predicho que las cosas serían así no servirá de consuelo a los disidentes, periodistas, artistas, intelectuales o simplemente familiares de los detenidos que han desaparecido en la mayor campaña de represión política que ha vivido el país desde Tiananmen en 1989.
Los encarcelados más conocidos son el Premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo y el artista Ai Weiwei, pero a ellos se les han unido personas anónimas que desaparecen sin dejar rastro, confinadas en celdas de aislamiento sin acceso a sus abogados o familias.
No, quizá no haya nada que podamos hacer para detener la ola de represión de la dictadura china (o de otras dictaduras). Nada salvo evitar convertirnos en sus cómplices con nuestro silencio.
Fuente: El Mundo
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Pekín dice que el activista Ai Weiwei evadió una ‘gran cantidad’ de impuestos
La policía china dijo el viernes que la compañía del artista y activista Ai Weiwei, detenido desde comienzos de Abril, había evadido una «gran cantidad» de impuestos.
La empresa Beijing Fake Cultural Development de Weiwei también había destruido intencionadamente documentos de contabilidad, dijo la policía de Pekín a la agencia estatal de noticias Xinhua, citando una investigación inicial.
La policía también dijo que la ley garantizaba a Weiwei el derecho a reunirse con las personas que vivían con él, mientras estaba bajo «vigilancia domiciliaria«.
Weiwei pudo ver a su esposa por primera vez el domingo tras ser detenido el 3 de Abril en el aeropuerto internacional de Pekín, generando protestas sobre el trato de China hacia los disidentes.
Fuente: El Mundo
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