La familia Rockefeller, accionista de Exxon, financia a Greenpeace
La organización ecologista más famosa del mundo recibe donaciones de grandes magnates del petróleo, la automoción y los mass media. El caso más llamativo es el de los Rockefeller -accionistas y fundadores de petroleras como Exxon Mobil-. Su fundación ha financiado a Greenpeace con más de un millón de dólares.
Por Manuel Llamas
Greenpeace, la organización ecologista más famosa y, posiblemente, poderosa del mundo se financia a través de las aportaciones voluntarias que realizan anualmente sus donantes. Según rezan sus estatutos, a fin de “mantener su total independencia, Greenpeace no acepta dinero procedente de empresas, gobiernos o partidos políticos. Nos tomamos esto muy en serio, y controlamos y devolvemos los cheques cuando provienen de una cuenta corporativa. Dependemos de las donaciones de nuestros simpatizantes para llevar a cabo nuestras campañas no violentas para proteger el medio ambiente”.
Sin embargo, dicho lema no incluye los generosos donativos que habitualmente recibe de grandes fundaciones y organismos sin ánimo de lucro que, curiosamente, pertenecen a grandes familias y magnates vinculados al petróleo, la banca, los medios de comunicación e, incluso, la automoción.
¿Cómo es posible? ¿La ONG ambientalista por excelencia financiada con el dinero que genera algunos de los sectores productivos más contaminantes del planeta? Un buceo en profundidad por las opacas cuentas de esta organización desvela grandes secretos y, sobre todo, muchas sorpresas.
Greenpeace cuenta con múltiples filiales repartidas por todo el mundo, pero una de las más poderosas e influyentes a nivel mundial es, sin duda, la sede ubicada en EEUU. La franquicia de Greenpeace cuenta con cuatro caras: Greenpeace Foundation, Greenpeace Fund Inc., Greenpeace Inc. Y Greenpeace Vision Inc..
El proyecto Activist Cash, creado por Center for Consumer Freedom -una importante asociación de consumidores estadounidense-, desvela algunas de las fuentes de financiación más polémicas de este grupo ecolojeta.
El proyecto surgió con la idea de aportar información acerca del perfil y recursos económicos de los grupos anticonsumo. Y, como no podía ser de otra forma, dicha entidad dedica un apartado exclusivo a Greenpeace. Según Activist Cash, Greenpeace ha recibido importantes donativos de las siguientes fundaciones, tal y como revela el siguiente gráfico:
Ahora bien, ¿qué son estos grupos? Son fundaciones pertenecientes a algunas de las familias más ricas del mundo, cuyas fortunas proceden del negocio del petróleo, la automoción y los grandes grupos de comunicación estadounidenses. El blog Desdeelexilio ha investigado estas cifras para corroborar la cuantía y veracidad de dichas aportaciones y el resultado es el siguiente.
El flujo de dinero entre las franquicias de Greenpeace con sede en EEUU es constante. La legislación norteamericana obliga a presentar anualmente una declaración de impuestos a este tipo de organismos en la que figuran ingresos y gastos.
La información anual del pago de impuestos de dichas filiales se encuentra en los denominados IRS Form 990 (Return of Organization Exempt From Income Tax). En dichos documentos oficiales aparecen detalladas algunas de dichas donaciones a lo largo de los últimos años.
Rockefeller Brother´s Fundation: 1,15 millones de dólares
Desde 2000 a 2008 la fundación de la familia Rockefeller ha financiado a Greenpeace con 1,15 millones de dólares. La fortuna de los Rockefeller procede del negocio petrolífero.
John D. Rockefeller fundó la empresa petrolera Standard Oil, que llegó a monopolizar el negocio del crudo a principios del siglo XX. Sin embargo, el Gobierno de EEUU acusó a la compañía de monopolio y decretó su división en 34 empresas, aunque los Rockefeller mantienen su presencia en las mismas.
La más famosa es, actualmente, Exxon Mobil Corporation, una de las mayores multinacionales petroleras del mundo. Los descendientes de John D. Rockefeller son accionistas de Exxon Mobil. Aunque minoritarios poseen todavía una importante influencia y peso en la compañía. Los Rockefeller también tienen presencia en grandes bancos como JP Morgan Chase & Co (Chase Manhattan Bank) o City Bank que, a su vez, poseen participaciones en grandes petroleras internacionales.
Marisla Foundation: 460.000 dólares
Dicha fundación también es conocida bajo la etiqueta de Homeland Foundation. Fue fundada en 1986 por la poderosa familia Getty. J. Paul Getty fundó la petrolera Getty Oil, ahora en manos de la rusa Lukoil.
Turner Foundation: 450.000 dólares
Turner Foundation fue creada por Robert Edward Turner en 1990. Ted Turner es uno de los grandes magnates de la comunicación en EEUU, dueño de conocidas cadenas de televisión como CNN, TNT y AOL Time Warner, entre otras. Su aportación a Greenpeace, 450.000 dólares en apenas tres años.
Charles Stewart Mott Foundation: 199.000 dólares
Charles Stewart Mott fue el padre del tercer grupo industrial de mayor producción de automóviles de todo el mundo: General Motors. Antes de declararse en quiebra -en Junio de 2009-, este grupo fabricaba sus vehículos bajo marcas tan paradigmáticas y poco contaminantes como Buick, Cadillac, Chevrolet, GMC, GM Daewoo, Holden, Opel, Vauxhall o el famoso Hummer.
En definitiva, no deja de sorprender que una de las organizaciones ecologistas más activas contra la emisión de CO2 a la atmósfera acepte suculentas sumas de dinero de algunos de los principales referentes del sector petrolífero y automovilístico a nivel mundial. Sobre todo, si se tiene en cuenta que Greenpeace abandera grandes campañas acusando a los escépticos del cambio climático de recibir dinero del sector petrolífero o grandes compañías industriales.
Fuente 1: Libertad Digital
Fuente 2: Bolsonweb
Fuente 3: Movimiento Anti NWO
Exclusivo: Matías Rojas, el Chileno que increpó a David Rockefeller
En exclusiva, el autor del video más visto en las últimas horas explica a El Observatodo como y porque decidió encarar a uno de los hombres más poderosos del planeta.
En ningún medio tradicional se informó de la llegada a Chile de uno de los hombres más poderosos e influyentes del planeta. David Rockefeller. Así pudo pasar casi inadvertido en el aeropuerto de Santiago, a su llegada al país, para pasar unos días en casa de su amigo Agustín Edwards Eastman, fundador del diario «El Mercurio».
Casi inadvertido. Porque armado con su cámara, Matías Rojas, un joven chileno de Curicó, de solo 17 años, lo esperaba pacientemente en el hall del terminal aereo. Un tanto nervioso esperó el momento justo en que el millonario llegara hasta el auto que lo esperaba, puso REC a su cámara y le gritó en su propia cara lo que miles, o quizás millones de personas quisieran gritarle a Rockefeller.
«Hey, Rockefeller, scumbag!» gritó Matías al millonario, quien a partir de ahí se dio cuenta que este joven chileno no era un fan suyo ni menos quería darle la bienvenida. El video fue subido a YouTube, y en menos de 24 horas ya tiene más de 100 mil visitas y mas de mil comentarios… y sigue en aumento.
El Observatodo conversó de manera exclusiva con Matías Rojas y quiso conocer porque se decidió a encarar a Rockefeller y cual es el mensaje que quiso dar con esta proclama.
El Observatodo: Primero que todo, ¿como y porque decidiste encarar a David Rockefeller?, uno de los hombres mas poderosos e influyentes del planeta?. ¿Que te motivó a hacerlo?.
R: Decidí que era mi deber como ciudadano chileno, informado de todo lo que este multimillonario representa en términos sociales y políticos, el dar la cara y manifestar mi repudio. Pienso que cada chileno debe proteger la justicia en este mundo, hacer valer sus derechos como dueños de esta tierra y expresar su desacuerdo con la ideología globalista y destructora del Sr. David Rockefeller, así como de cualquier otro agente de la élite destripadora de nuestra soberanía.
El Observatodo: Con esto, ¿cual es el mensaje que quisiste dar?
R: Quise, número uno, dejar plasmado un ejemplo de convicción por la verdad y la justicia ante el pueblo chileno. Número dos, quise hacerle saber a este tipo de personas que no están a salvo de nuestra furia, como humanidad conciente, por lo que están haciendo. Y finalmente, número tres, mi deseo era generar polémica, forzar a los medios oficiales a admitir la visita de David Rockefeller y llevarlos a cubrir su interesante, si no sospechosa, estadía veraniega en Chile.
El Observatodo: Hay que tener agallas (por decirlo de manera educada) para hacer lo que hiciste. ¿No tuviste miedo de ser agredido por guardias o guardaespaldas?
R: Siempre hay un grado de miedo, pero sentí que había que hacerlo. Me sorprendió ver la reacción de los guardaespaldas presentes, casi sin inmutarse. Uno, o están muy acostumbrados a este tipo de asalto verbal; dos, no estaban preparados con guardaespaldas rudos; o tres, les da prácticamente lo mismo, han despertado y no quieren ser cómplices. Creo que es una mezcla de los tres. De hecho, uno de ellos reía mientras lo confrontaba.
El Observatodo: ¿Que sentiste al tenerlo frente a frente?
R: Mucha impotencia por decirle todo lo que sentía. Luego la bola de nieve rodó por un minuto. Al inicio, presumo, pensó que era un fan de él, e incluso me saludó, pero una vez que me escuchó expulsándolo verbalmente del país, su rostro cambió. Al momento en que lo traté de asesino y volvió a reir, me alteré aún más. Y para qué hablar de cuando me encontré por sorpresa con Agustín Edwards. No tenía idea de que estaba ahí en persona para recogerlo.
El Observatodo: Hay mucha gente en YouTube que está comentando y felicitandote por lo que hiciste. ¿Que sientes respecto a eso?
R: Me siento honrado por haber sido unas de las pocas personas en confrontarlo y por dejar el nombre de nuestro país «bien parado«. Debiese ser un ejemplo, repito, que comunique a estos elitistas que un país como Chile no se vende ante nadie y que no servirá como reserva para sus recursos o refugio ante el colapso económico inminente que se avecina.
El Observatodo: Tuviste enfrente también a Agustin Edwards. ¿Que representa para ti?
R: Independiente de la corriente política que compartas, Agustín Edwards es cómplice de conspirar con células de inteligencia extranjeras para influenciar la gestión política local chilena (principalmente en el período previo al golpe de Estado en 1973). He leído a muchas personas tratándome de «comunista» por hacer lo que hice. Yo les diría que la Fundación Rockefeller y el consorcio petrolero del Sr. Rockefeller ha estado involucrada en financiar ambos bandos del espectro político. La élite a la cual pertenece este señor está dispuesta a colaborar con cualquier modelo dictatorial que exista. Volviendo a Edwards, «El Mercurio» también sirvió como filtro para culpar injustamente al ciudadano pakistaní Mohammed Saif Ur Rehman Khan e instalar la idea de un terrorismo islámico en Chile, mediante el acceso a dudosa documentación de células chilenas «de inteligencia» en el país. El imperio mediático de Agustín Edwards es un brazo más de las sombras de élite. Un ejemplo de eso es la presidencia de un ancestro de Agustín, llamado Agustín Edwards McClure, en la Liga de Naciones durante 1922-23. Nótese que la familia Rockefeller, una vez que la Liga de Naciones falló, hizo lo posible por promover la Organización de Naciones Unidas (ONU), e incluso donó los terrenos que actualmente sirven para sus cuarteles generales en New York. La historia se repite.
El Observatodo: ¿Crees representar a cierto sector de la juventud que se interesa en temas mas alla de farandula o temas inocuos?.
R: Por supuesto. La gran mayoría de la juventud actual está tan contaminada con banalidades que hoy en día sus niveles de prioridad están prácticamente arruinados. No obstante, aún hay esperanza, y mi intención es también crear consciencia, para que al menos se pregunten, «¿Quién es este anciano en silla de ruedas?«, «¿Quién es este viejo con cara de diablo?«. Mi mejor apodo para él y para muchos es Duendefeller y calzó perfectamente cuando lo tuve enfrente.
El Observatodo: ¿Como supiste de la fecha y hora en que llegaba Rockefeller?.
R: Por Internet. Todo se sabe por Internet estos días. Yo me pregunto, ¿Por qué los medios oficiales no cubren esta extraña reunión? ¿Por qué un ciudadano común y corriente debe ir y confrontarlos, y hacerle saber a todo Chile que un multimillonario banquero, culpable de haber financiado genocidios de millones de personas, vacaciona en el país?
El Observatodo: Una pregunta (que no es nuestra en realidad, jaja) ¿No sentiste ganas de hacer otra cosa, como lanzarle un zapato, tal como pasó con Bush en Irak?.
R: Creo que usar violencia física para confrontar a estos tipos es rebajarse a su nivel. Yo tengo la verdad, desde sus propias bocas, y es suficiente. Además, el violentar físicamente contra ellos les da una excusa para coartar nuestras libertades bajo la excusa de «dar seguridad a la nación«. Actualmente, eso es lo que está ocurriendo en Estados Unidos con los disidentes del gobierno y el consorcio bancario global, o Nuevo Orden Mundial.
El Observatodo: ¿Chile es parte de este nuevo orden?
R: Por supuesto. No necesariamente por tener un protagonismo escaso en la arena mundial, Chile no significa nada para la élite. En realidad, tenemos un ejemplo de que la élite planea utilizar Chile y Latinoamérica como reserva para sus secuaces: el imperio ecológico de Douglas Tompkins, la compra de tierras por parte de Ted Turner y otros. El propio abogado de Tompkins (Pedro Pablo Gutierrez) admitió en la prensa hace un par de años que la compra de tierras se financia con dinero de la Fundación Ford y la Fundación Rockefeller. No basta investigar más allá para saber que el Sr. David Rockefeller ama el sur de Chile. Si no fuese así, él no estaría aquí perdiendo el tiempo y vacacionando en el Lago Ranco con Agustín Edwards.
El Observatodo: ¿Militas en algun movimiento social, partido politico?.
R: Hasta ahora he querido mantenerme alejado de alguna etiqueta política, pero sí pertenezco a un grupo sin distinción política, ni étnica, ni ideológica. Aún no hay nombre, pero hay deseos pocos de adherirse a WeAreChange, una organización anti-tiránica que comenzó con la exposición del 9/11 como un fraude en los Estados Unidos y que tiene
sus chapters en todo el mundo. A nuestro grupo chileno me gusta llamarlo la Resistencia Anti NWO de Chile, y con eso es suficiente.
El Observatodo: Ahh, por cierto, hablas bastante bien Ingles. ¿Aprendiste en el colegio? (pregunta capciosa)
R: Francamente no hablaba inglés hasta hace 3 años, cuando comencé a familiarizarme con videos expositores del Nuevo Orden Mundial en Internet. Luego comencé a poner subtítulos a algunos de esos videos y poco a poco logré perfeccionar mi inglés ejercitando el oído y ojeando el diccionario. Nada tan extraordinario, pero al menos el Sr. Rockefeller entendió que ningún chileno quiere verlo cerca de tierras chilenas. Trabajo hecho, y estoy orgulloso.
Fuente 1: El Observatodo
Fuente 2: 1984
Artículo relacionado:
La mentira de la «sobrepoblación». La pseudociencia y los tontos útiles al servicio de la ideología antivida
Por Adolfo J. Castañeda
Introducción
Podríamos definir la ideología, en un sentido peyorativo del término, como un sistema de ideas que pretende ser una descripción científica y verdadera de la realidad social, pero que en el fondo no es más que una construcción conceptual falsa, cuyo propósito es darle una apariencia de legitimidad a los que detentan el poder o a los que buscan dominar la conciencia colectiva.
Este tipo de ideología es la que parece caracterizar a los que promueven el control demográfico, quienes utilizan para ello una falsa propaganda acerca de la «sobrepoblación» mundial. Como señala el investigador Anthony C. LoBaido: «Es quizás la campaña de desinformación más grande de la historia: que el planeta está excesivamente sobrepoblado y que, a menos que se haga algo para limitar el crecimiento demográfico, el resultado será la calamidad» (1). LoBaido prosigue diciendo que los alarmistas de la «sobrepoblación» insisten en que «la hambruna y el agotamiento de los recursos… son las razones principales que justifican la limitación de la reproducción humana» (1).
LoBaido se queja, y con razón, de que, lamentablemente, «son pocos los que pueden presentar los datos que repudian esta errónea y acientífica suposición» (1). Nosotros nos atrevemos a decir que quizás más bien son pocos los que están dispuestos a hacerlo. Un poco de historia… y de histeria.
La histeria contemporánea en torno a la «sobrepoblación» comenzó en 1968 con la publicación de una obra, luego muy difundida, titulada The Population Bomb («La bomba de la población«). Su autor, Paul Ehrlich, fue mentor de Al Gore, el actual vice-presidente de Estados Unidos, que comparte ideas similares con los propagandistas del control demográfico y con sus socios ideológicos: los ambientalistas extremistas.
En su ya mencionado libro, Ehrlich, quien ni siquiera era demógrafo, predijo que «nos reproduciremos hasta caer en el olvido» (1), es decir, hasta la extinción. «Basados en esta suposición, los contribuyentes en Estados Unidos están gastando miles de millones de dólares en programas de control demográfico a través del mundo. La mayoría de esos programas se llevan a cabo en países del tercer mundo, que están poblados por gente de piel oscura, amarilla, cobriza o negra» (1).
El actual movimiento en pro del control demográfico hunde sus raíces en las ideas de Thomas Malthus. «Malthus, de origen británico, es una figura histórica de gran notoriedad. Su obra más estudiada, An Essay on the Principle of Population… («Un ensayo sobre el principio de la población…»), fue publicado por primera vez en 1798. Este libro proponía la tesis de que la sobrepoblación destruiría el mundo, a no ser que la guerra y la enfermedad controlaran el crecimiento de la población humana. Pero se ha demostrado que dicha tesis estaba completamente equivocada» (1).
«Malthus pensaba que, como la población aumenta exponencialmente, mientras la producción de alimentos sólo aumenta aritméticamente, que esta última no podría de ningún modo mantenerse al mismo nivel que el creciente número de estómagos vacíos. Irónicamente, Malthus predijo una inanición a gran escala en la víspera de una de las mayores expansiones agrícolas que la humanidad ha conocido. En los países libres, el hambre ha sido eficazmente eliminado» (1).
Implosión demográfica, en vez de «sobrepoblación»
Lo cierto es que, en vez de estar experimentando una «sobrepoblación«, la humanidad está sufriendo actualmente una peligrosa implosión demográfica. De hecho, «la población mundial está envejeciendo y disminuyendo. A medida que las tasas de fertilidad disminuyen y el aborto, la anticoncepción y la longevidad aumentan, el mundo entrará pronto en un nuevo paradigma en el cual los ancianos serán más numerosos que los jóvenes» (1). Considérese lo siguiente: «En 1975, la edad promedio en el mundo era de 22 años. Para el 2050, ésta será de 38. En particular, Europa, Corea del Sur y Japón recibirán el impacto más duro de este fenómeno» (1).
Para poder apreciar debidamente el peligro para la humanidad que constituye la actual implosión demográfica, invitamos al lector a que preste mucha atención a la información que sigue.
Europa: Los jóvenes disminuyen y los ancianos se quedan sin pensión
«En 1950, el 32% de la población mundial vivía en los países desarrollados del occidente, así como en Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. En la actualidad, ese porcentaje ha disminuído hasta alcanzar el 12%. En 1900, Europa tenía el 25% de la población mundial. Para el 2050, Europa tendrá solamente el 7%» (1).
España es uno de los casos más paradigmáticos. «El aborto está muy difundido en esa nación…[la cual] se encuentra en un declive moral… Las mujeres españolas tienen un promedio de 1,07 hijos, mucho menos del 2,1 que se necesita para mantener la población. Hoy España tiene 39,4 millones de habitantes, una cifra que comenzará a disminuir en las próximas décadas» (1).
Pero hay más todavía. El Presidente de la Comisión Europea advirtió recientemente a los gobiernos, que para el 2005 cerca de la tercera parte de la población de ese continente estará cobrando sus pensiones. Romano Prodi, de Italia, también advirtió que el gobierno será quien pague casi todas las pensiones, es decir, los contribuyentes europeos cargarán con los gastos. La advertencia de Prodi se suma a una serie de predicciones desoladoras en relación con los resultados del control demográfico (2).
Luego de décadas de propaganda alarmista acerca de la «sobrepoblación» y de programas, apoyados por los gobiernos, para el «crecimiento cero de la población«, la mayoría de los países europeos ya no se están reemplazando a sí mismos demográficamente. La Organización de Naciones Unidas (ONU) informa que 61 países, y toda Europa, están sufriendo una «fertilidad por debajo del nivel de reemplazo«, es decir, por debajo del 2,1 ya mencionado. Los expertos predicen que esta cifra aumentará a unos 80 países para el año próximo del 2001 (2).
Los expertos también predicen que, para el 2050, la población de Italia disminuirá en un 28%, o sea, 41 millones de habitantes menos. También predicen que la Unión Europea en su totalidad sufrirá una implosión de 18 millones de personas más que la que sufrirá Estados Unidos, cuya población todavía continúa creciendo gracias a la inmigración (2).
Pero los problemas demográficos no sólo están afectando a Europa occidental. Los países ex- comunistas de Europa oriental tienen problemas demográficos aún peores. En un informe emitido recientemente por la Comisión Económica de la ONU para Europa, se predice que, para el 2050, los niveles de la población disminuirán en un 33% en los países ex-comunistas. El informe declara que los países de Europa oriental tienen las tasas de fertilidad más bajas del mundo. Las últimas cifras, de 1998, revelan que las mujeres tienen un promedio de 1,3 hijos en Europa oriental, comparado con el de 1,6 de Europa occidental (2).
El resultado inmediato de la «fertilidad por debajo del reemplazo» es una población envejeciente. A medida que la población anciana llega a la edad de retiro, tiene que depender de un seguro social y de sistemas de salud de rápida expansión. Este problema se duplica porque un disminuyente número de trabajadores más jóvenes y productivos no puede suplir las crecientes necesidades de la población de mayor edad (2).
El problema de Europa se exacerba aún más debido a que las leyes permiten la jubilación a una edad demasiado temprana para ello. Italia permite a sus trabajadores restirarse a los 50 años. Aunque la edad legal para el retiro, en la mayor parte de Europa, es a los 65 años, la sanción económica para la jubilación temprana es tan pequeña que muchos optan por dicha jubilación de todas maneras. Según un informe publicado en el Herald Tribune, la edad promedio de retiro para los hombres es de 61 años y para las mujeres, de 58 (2).
Un informe reciente de la ONU demostró la necesidad de un aumento dramático de la inmigración para suplir la carestía en la fuerza laboral europea. Ello parece ser políticamente infactible, ya que desafortunadamente han surgido sentimientos anti-inmigrantes ante el número relativamente pequeño de trabajadores extranjeros en Europa. De hecho, han surgido partidos políticos que se oponen vehementemente a la inmigración (2).
A los expertos Pro vida también les preocupa que la situación europea de poblaciones que envejecen rápidamente y que causan que los servicios sociales se estiren excesivamente será un caldo de cultivo para el aumento de la falsa y criminal «solución» de la eutanasia. Ya esta infame práctica se está llevando a cabo en Holanda (2).
En peligro las niñas asiáticas
El Gobierno chino tiene una horrible política de un solo hijo por familia. «Pero ahora el gobierno chino está comenzando a cuestionar dicha política. Como la mayoría de los chinos quieren hijos varones, abortan a las niñas a gran escala. No es fuera de lo común que una familia china mate a su hija de dos o tres años, si la madre se embaraza de nuevo con un hijo. Dentro de 100 años, China tendrá mucho más niños que niñas» (1).
«Corea del Sur tiene un problema similar. Debido a los abortos de niñas, hoy en día la población infantil de los centros para pre-escolares de Seúl está constituída aproximadamente por un 60% de varoncitos» (2).
Una población numerosa no es la causa de la pobreza
«Las principales ciudades de Asia, Bangkok, Seúl, Singapur, Tokío y Hong Kong, están sobrepobladas, sin embargo, son prósperas. Por ejemplo, Hong Kong, Singapur, y Taiwán… son unas de las naciones más ricas de Asia, si no del mundo. Taiwán tiene una densidad demográfica de 1.460 habitantes por milla cuadrada [= 912.5 habitantes por kilómetro cuadrado]; mientras que China tiene una densidad demográfica de 360 habitantes por milla cuadrada [= 225 habitantes por km2]. Sin embargo, según el World Fact Book 1999, el producto interno bruto per cápita de Taiwán era de $16.500; mientras que el de China era de $3.600» (2).
Por otro lado, las densidades demográficas de África y América Latina, continentes por lo general pobres, son de solamente 80 y 55 habitantes por km2, respectivamente. Sin embargo, la de Europa, continente por lo general desarrollado económicamente, todavía es de 213 -casi 3 veces la de África y casi 4 veces la de América Latina (3).
De hecho, la población mundial actual, de aproximadamente 6 mil millones de personas, sólo ocupa el 1% de la superficie firme del planeta y, matemáticamente hablando, cabe cómodamente, según el típico hogar estadounidense, en el Estado de Téjas, ¡dejando al resto del mundo completamente vacío! (4). Verdaderamente LoBaido tenía razón al decir que el mito de la «sobrepoblación» es «quizás la campaña de desinformación más grande de la historia«.
La causa de la pobreza no es la «sobrepoblación«. De hecho, se necesita un cierto nivel elevado de población para que la economía pueda funcionar con eficiencia. Los obreros y los labriegos, por ejemplo, tienen que ser abundantes y estar cerca unos de otros para poder fabricar máquinas, construir carreteras o cultivar la tierra con eficiencia. Las causas de la pobreza hay que situarlas en la mala administración, en la corrupción gubernamental, en la centralización estatal de la economía, en la injusticia social, en el capitalismo sin regulación alguna por parte del Estado, en las guerras y en las catástrofes naturales; no en una elevada población como tal.
El control demográfico y el poder ideológico
Los principales promotores del control demográfico mundial son el Departamento de Estado de Estados Unidos y la Organización de Naciones Unidas (ONU). Las medidas que estas dos entidades toman para este propósito reciben gran parte de sus fondos de fundaciones en Estados Unidos, como la Ford y la Rockefeller. Ted Turner, el fundador de la CNN, también es uno de los que más contribuye a la ONU para el control demográfico. Cuando ciertos congresistas de Estados Unidos amenazaron con no pagar la cuota estadounidense a la ONU, si dicha cuota iba a ser usada para establecer clínicas de abortos en el extranjero, Turner donó cientos de millones de dólares a la ONU. Bill Gates, el dueño de la gigantesca empresa de computadoras Microsoft, también ha donado muchos millones de dólares al control demográfico y al aborto. No cabe duda de que el aborto y el control demográfico son unas de las prioridades más importantes de las potencias y de las élites dominantes de occidente (2) y (7).
Se podría especular mucho sobre cuáles son los motivos de los que promueven el control demográfico mundial. Nos parece que el discernimiento espiritual cristiano tiene la respuesta. Durante mucho tiempo la reflexión cristiana ha llegado a la conclusión de que los tres grandes enemigos de la persona, en su dimensión ética, son el amor al dinero, al placer y al poder.
No cabe duda de que el dinero, o mejor dicho, la seguridad de continuar ostentando el poder económico, es uno de los motivos por los cuales las naciones poderosas controlan las poblaciones de los países en desarrollo. Ya en otra publicación hemos abundado sobre este punto (5). Aquí nos limitamos a decir que, a principios de los 70, el Departamento de Estado de Estados Unidos emitió un documento, El Informe Kissinger, en el cual se afirmaba que los intereses económicos de ese país exigían el control demográfico de los países menos desarrollados. El temor a un agotamiento de las materias primas en esos países, a causa de un crecimiento demográfico «descontrolado«, era una de las razones aducidas (5).
En cuanto al placer, tampoco cabe duda de que tanto el aborto como la anticoncepción prometen (aunque no siempre lo cumplen) a sus usuarios (y más aún, a los «compañeros varones» de sus usuarias), una vida de promiscuidad o de libertinaje sexual sin límites.
¿Y el poder? ¿Dónde entra el ansia de poder en todo esto? En el Informe Kissinger, ya mencionado, se afirmaba también que un crecimiento demográfico «desmedido» de la población en los países en desarrollo podría consituirse en una tentación a la rebeldía contra los países ricos (5).
Pero nos parece que el ansia de poder en relación con la promoción del control demográfico tiene otra variante. Se trata del ansia de poder ideológico por el puro placer del poder. El poder desmedido es una adicción. Alguien ha dicho que «el poder absoluto corrompe absolutamente«. No estamos hablando simplemente de un poder económico o político, sino de un poder ideológico, es decir, de ejercer poder, o mejor dicho, de dominar y determinar la ideosincracia de los pueblos. Un dictador podrá dominar política y económicamente a un pueblo, pero no podrá dominar la mentalidad de todos sus habitantes. Siempre habrá disidentes. Pero lo que parecen pretender los que promueven la escondida y sutil guerra contra la población pobre del mundo es engañarla (seducirla es la palabra más exacta, pues se trata de la explotación de la dimensión más íntima y vulnerable de la persona humana: su sexualidad) -y engañarla de tal forma, que los mismos miembros de esa población crean ingenuamente que se les está haciendo un bien. De ese modo, ellos mismos cooperarán alegremente con su propia extinción.
A los nazis y demás asesinos en masa del siglo pasado, se les ha llegado a reconocer como lo que fueron: genocidas perversos. Tanto su poderío militar y su manera infame de comportarse, por un lado, como el desvastado aspecto de sus inocentes víctimas, por el otro, no dan lugar para las dudas, ya no engañan a casi nadie. Pero, ¿qué decir de los que con exquisitos ademanes, atractivas frases eufemísticas y elegantes vestidos trabajan en impecables oficinas o participan en prestigiosos foros internacionales, donde se decide la suerte de millones de víctimas inoncentes, cuyo número anual supera al de todas las guerras y masacres juntas del pasado? A estos últimos, pocos los reconocen por lo que son. Y, ¿por qué?
Los tontos útiles
Decíamos al comienzo de este artículo que el investigador LoBaido se quejaba de que «son pocos los que pueden presentar los datos que repudian esta errónea y acientífica suposición«, es decir, de la falsa «sobrepoblación«. ¿Por qué? Se nos antoja pensar que ello se debe a dos posibilidades: 1- a que la mayoría de los que tienen en su poder los datos correctos trabajan a favor del establishment, es decir, mienten y tergiversan los datos por conveniencia o 2- que los que no tienen los datos correctos, pero están en posición de tenerlos (intelectuales, estudiosos, miembros del academia, miembros de la prensa, gobernantes y el público en general) o son cómplices de los primeros o son tontos útiles que se tragan a boca llena lo que dicen Naciones Unidas, Al Gore o los Paul Ehrlich de la actualidad.
Todos los años el gobierno de Estados Unidos suministra millones de dólares de los contribuyentes a organizaciones que promueven los anticonceptivos abortivos y el aborto (todos ellos dañinos y a veces fatales también para las mujeres). Entre esas organizaciones se encuentran la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF, por sus siglas en inglés) y el Fondo de Población de la ONU (FNUAP o UNFPA, por sus siglas en inglés) (6), que ha colaborado con el infame programa del gobierno chino de un solo hijo por familia, que incluye abortos y esterilizaciones forzosas e infanticidios de niñas. El propio Fondo para la Infancia de la ONU (UNICEF) también está involucrado de cierta forma en este genocidio, por cuanto su red de contactos a través del mundo es útil a la IPPF y al FNUAP (6). ¿Y por qué sigue la gente cooperando tontamente con estas organizaciones o permitiendo sin protestar que sus impuestos sean utilizados para matar inocentes criaturas no nacidas y para destruir familias alrededor del mundo? La única respuesta posible es la ignorancia, fruto de la complicidad cobarde e irresponsable de los medios de comunicación y, al mismo tiempo, la falta de sinceridad y esfuerzo en la búsqueda de la verdad por parte de dichos medios y también por parte del público en general.
Una cosa es cierta, nosotros los cristianos, que nos gloriamos de conocer al que es «el Camino, la Verdad y la Vida» (Juan 14:6), tenemos que dejar de ser tontos útiles en manos de los que promueven el genocidio más grande la historia de la humanidad. No podemos seguir como avestruces ignorando que cada año el aborto quirúrgico mata a más de 50 millones de criaturas no nacidas, que el aborto causado por los principales anticonceptivos mata a más de 140 millones en el mismo período de tiempo y que todos los años son decenas de miles los ancianos y los enfermos que mueren víctimas de la eutanasia. Y no hablemos de los millones de mujeres lesionadas física y psicológicamente (por no decir muertas) por el aborto legal o ilegal, ni de los millones de niños y jóvenes cuya integridad psicológica y moral ha sido perturbada seriamente por los programas de la mal llamada «educación» sexual -por no decir víctimas del SIDA y de muchas otras enfermedades venéreas, ante las cuales el preservativo vale lo que el casco de un soldado fuera de su trinchera ante una lluvia de balas.
Conclusión
El conocimiento verdadero, unido al amor, da poder; pero no el poder para dominar, sino para servir a nuestros semejantes. ¡Dejemos de ser tontos útiles e informémonos! Vida Humana Internacional está aquí para ayudarlos en esta tarea tan importante. Únase a Vida Humana Internacional para juntos luchar contra esta «cultura» de la muerte y para construir la cultura de la vida y la civilización del amor.
Adolfo J. Castañeda es Coordinador Auxiliar y Director de Programas Educativos de Vida Humana Internacional.
Notas: 1. Anthony C. Lobaido, The Overpopulation Lie. Mass Abortion, ‘Gendercide’, Junk Science Leading to Under-Population Crisis, WorldNetDaily.com, Inc., 2000 www.worldnetdaily.com, 2 de mayo del 2000. 2. Austin Ruse, «European Pension Systems Set To Collapse/Low Fertility Blamed», Friday Fax, 4 de mayo del 2000. Vol. 3. No. 24. Austin Ruse es el Presidente del Instituto Católico para la Familia y los Derechos Humanos o C-Fam (Catholic Family & Human Rights Institute), una entidad no lucrativa que se dedica a observar y a informar sobre las actividades de la ONU en los asuntos que tienen que ver con la vida humana, la familia y el control demográfico. Diríjase (en inglés) al Catholic Family & Human Rights Institute, 866 United Nations Plaza, Suite 4038, New York, New York 10017, USA. Tel.: (212) 754-5948. Fax: (212) 754-9291. E-mail: c-fam@c-fam.org. Página web: http://www.c-fam.org. C-Fam publica un boletín semanal electrónico o en fax, titulado Friday Fax («Fax del viernes»). 3. Adolfo J. Castañeda, ¡Vale la pena vivir! (Miami: Vida Humana Internacional y Florida Center for Peace, 1997), 107; totalmente documentado y disponible a la venta en las oficinas de Vida Humana Internacional. 4. Ibíd., 107. 5. Ibíd., 37-41. 6. Ibíd., 108. 7. ACI Digital, 9 de febrero de 1999, citado en «Bill Gates hace donación histórica al control demográfico y al aborto», Escoge la Vida (marzo-junio de 1999): 7.
Fuente: Vida Humana
Artículos relacionados: